EL PROGRESO:

EL PROGRESO:

Un pueblito, cercano a nada, rodeado de todo. Los chicos no tienen más que sus sonrisas, tienen todo. Piernas para correr, tierras para jugar, adultos para aprender.
Los días no se viven, los días se respiran. Las noches no se duermen, las noches se sueñan.
Las estrellas son un ábaco irrompible, las nubes son la sombra que no se puede talar. 
El agua bebe la tierra, en la eterna comunión.
Las mujeres y los hombres se confunden con el paisaje, solo se diferencian cuando se aman.
Un día llega al pueblo, la noticia del Progreso.
Pronto los cables fueron ocupando el lugar de las nubes, los postes, el de los árboles y las sonrisas se convertían en dudas.
La electricidad.
A la noche, las estrellas brillaban menos, en el día las nubes daban la sombra que nadie más veía.
Había llegado al pueblo la televisión.
La televisión les mostró todo lo que tenia para venderles.
De un día para el otro, el pueblo perdió su alegría.
Es que se había dado cuenta lo pobre que era.

Bruno Saccavino