Comparto las preguntas y al mismo tiempo valoro los pronunciamientos, como el del Obispado de Bariloche, la comunidad claretiana y la Iglesia metodista. Si decimos que seguimos a Jesús de Nazaret no podemos callarnos....
Me hago eco de Eduardo Chingolo Rodríguez, viejo cura en opción por los pobres, en el encabezado agregaría a la Conferencia Argentina de Religiosas y Religiosos, Equipo Nacional de Pastoral Aborigen y a la familia franciscana, empezando por los hermanos menores:
"Obispos patagónicos, gran familia salesiana patagónica, la misma Conferencia Episcopal y todos los que pastorean al mapuchaje patagónico, les hago llegar esta pregunta-inquietud-reclamo: ¿es cierto que los mapuches son terroristas?; ¿es justa y justificada la persecución y muertes que están sufriendo? ¿no es hora de decir algo? ¿no es hora de denunciar que no están usurpando nada, sino que están siendo "usurpados" por Bennettones, Lewis y terranientitos locales? ¿no es hora de denunciar que no se cumplen derechos de los mapuches y sus tierras? ¿no es hora de denunciar que en nombre de la mentira y un inventado "plan terrorista", vuelve Roca y su campaña del desierto? De nuevo los bajados de los barcos, descubrieron tierras, riquezas y habitantes y se creen dueños de todo.
Don Jaime de Nevares, el Juvenal Currulef, mapuche puro, Miguel Esteban Hesayne, Francisco Calendino y muchos otros pastores mapucheros oirían gustosos, palabras de aliento a los mapuches y palabras de enojo a los atropelladores. Los muchos mapuches patagónicos, respirarían y vivirían seguros, amparados, valorados en su dignidad y derechos. No se sentirían como "perros sarnosos" que es lo que quieren inculcarnos estos "falsos purificadores". Que vienen a ser huincas, como siempre los llamó el mapuche. Que el gringo, el Roca, el de ayer y el de hoy, lo tradujo por blanco. E hizo "laigt" el asunto. Lo disfrazó, lo suavizó, lo acomodó a su lenguaje mentiroso de ayer, de hoy y de siempre. La historia vuelve a repetirse. Y cuando el mapuche dice huinca, el mapuche dice ladrón."
"Desoír o ignorar durante décadas reclamos, puede esconder sutilmente, algún tipo de violencia institucional", enfatizó la Iglesia en el comunicado en referencia al reclamo del pueblo mapuche por los territorios. Y agregó que la muerte de Rafael Nahuel fue "fruto del accionar de las fuerzas federales, en un operativo ordenado y supervisado por el Juzgado Federal de Bariloche", a cargo del juez federal
Gustavo Villanueva, quien ordenó el operativo de desalojo.