La política provincial entre los votos y el veneno

Pensando mientras se pueda...
Entre cosecha y cosecha
viene el dinero,
se va la salud
paga juan pueblo

Quienes se mantengan informados a través de la prensa santafesina y a veces nacional, (Página 12, La Capital, etc) habrán constatado que ante el pedido de las organizaciones socio ambientales, al gobierno de la provincia de Santa Fe, para que el fallo del Juez de San Jorge se extienda a toda la provincia, ha suscitado declaraciones contradictorias entre ministros, entre ministros y gobernador y al interiro de sus propios discursos personales. Esto no es raro ya que de una sóla vez se complacen a los diferentes sectores en pugna: los que se debaten entre salud y un modelo productivo inclusivo y sustentable y los que detentan el modelo enfermador y ganancial exportador.

La división del poder no se da sólo hacia adentro del Socialismo-Radicalismo sino también en las fuerzas del P.J. Así podemos encontrar, como siempre en la historia nacional, quienes están con los votos de la agro clase media exportadora y en consecuencia con las empresas multinacionales que les deriban parte de sus cuantiosas ganancias y los sectores que, a la izquierda de la derecha sin llegar a ser la izquierda, se posicionan buscando alternativas que van desde las que sólo pretenden el cumplimientos estrictos de leyes ineficaces para el problema, pasando por los que quieren leyes nuevas y nuevos modos de control, hasta los que proponen cambiar el sistema agro productivo por otro totalmente diferente. El problema es que quienes están por el cambio, sea este moderado o rotundo, no escapan a las leyes del oportunismo político que se despliega hacia adentro de la lucha de poder intrínseca al poder mismo, lo que las torna no sólo poco creibles sino meramente inconducentes por cuanto no se apoyan en la base poblacional sobre la que deben operar las transformaciones. En un lógica simplista la cuestión se reduciría a esto: tomar el poder o tener el poder para hacer cambiar a quienes no quieren cambiar, cosa que se puede intentar pero ya sabemos en qué termina (en el mejor de los casos, si se mantienen coherentes y hacen los cambios, a la próxima elección no te votan más y entran los que vuelven a dejar todo como antes o peor aun, derrotadas las voces que proponían lo distinto van más hondo aún)
Quienes detentan el poder actualmente, hacia adentro de sus partidos y a nivel de la estructura general del Estado, se seguiran apoyando sobre la base productiva que es la garantizadora de votos y de dineros para el funcionamiento provincial, a la vez que es también su límite.
Por tanto cabe preguntarse si esta encrucijada se pasa y resuelve desde los partidos del sistema y el poder o se debe plantear como una cuestión socio-educativa que opere sobre otros actores.
Sin creer que es una o la otra, pareciera ser que la construcción de un modelo diferente va por varios carriles, pero que se resulve por el costado de lo social cuando este se politiza de manere diferente al modo en que está politizado hoy.
Un signo importante es lo ocurrido en San Jorge, no sólo a nivel de la justicia sino con los sindicatos reunidos y alertados por estas problemáticas. Otro signo de una politizadad diferente es el paulatino involucramiente de médicos y actores de la salud que otrora permanecían en silencio sin saber a qué atenerse y que ahora comienzan a atar cabos, a dar cuenta de lo que ha ido pasando frente a sus estetoscopios. Además de las importantes voces de la investigación nacional y provincial que da cuenta de un fenómeno que a gran velocidad, en pocos años, ha puesto a los habitantes de la provincia en situacones sanitarias deplorables y catastróficas.