Awkache Antu
Una vez tuve en mano y leí una nota escrita allá por el año cuarenta y pico, en donde mi abuelo, sí, mi abuelo escribió de puño y letra junto a la comunidad de la que formaba parte, la exigencia al estado nacional que deje de avalar los atropellos de los grandes terratenientes que avanzaban sobre los campos de la comunidad, alambrando campo adentro, imponiendo así su "propiedad privada". La denuncia era realizada hacia un señor de apellido Bestene. ¿Te suena? Familiar directo del dueño del diario jornada.
Hubo otra vez que me senté a escuchar de mi otro abuelo su añoranza por el campo arrebatado por el ejército argentino allá en los años veinte. Lo despojaron de su tierra y lo condenaron a vivir en la ciudad, marginado y luchando con sudor para poder sobrevivir junto a su familia.
Fijate vos cómo mis ancestros tuvieron en claro el enemigo y lo que representaba.
Como me hubiera gustado que esa misma nota o esa misma historia la leyeran o escucharan algunxs parientes que tienen sangre, apellido, nombres y cuantas cosas más de mi pueblo y sin embargo, se tragan por omisión, ignorancia o conveniencia el verso y la dominación de los poderosos alimentando así la letanía hacia los opresores.
Por ello, admito que no tengo "la verdad", pero tengo más que claro de qué lado de la mecha me encuentro.
Una vez tuve en mano y leí una nota escrita allá por el año cuarenta y pico, en donde mi abuelo, sí, mi abuelo escribió de puño y letra junto a la comunidad de la que formaba parte, la exigencia al estado nacional que deje de avalar los atropellos de los grandes terratenientes que avanzaban sobre los campos de la comunidad, alambrando campo adentro, imponiendo así su "propiedad privada". La denuncia era realizada hacia un señor de apellido Bestene. ¿Te suena? Familiar directo del dueño del diario jornada.
Hubo otra vez que me senté a escuchar de mi otro abuelo su añoranza por el campo arrebatado por el ejército argentino allá en los años veinte. Lo despojaron de su tierra y lo condenaron a vivir en la ciudad, marginado y luchando con sudor para poder sobrevivir junto a su familia.
Fijate vos cómo mis ancestros tuvieron en claro el enemigo y lo que representaba.
Como me hubiera gustado que esa misma nota o esa misma historia la leyeran o escucharan algunxs parientes que tienen sangre, apellido, nombres y cuantas cosas más de mi pueblo y sin embargo, se tragan por omisión, ignorancia o conveniencia el verso y la dominación de los poderosos alimentando así la letanía hacia los opresores.
Por ello, admito que no tengo "la verdad", pero tengo más que claro de qué lado de la mecha me encuentro.
Hubo otra vez que me senté a escuchar de mi otro abuelo su añoranza por el campo arrebatado por el ejército argentino allá en los años veinte. Lo despojaron de su tierra y lo condenaron a vivir en la ciudad, marginado y luchando con sudor para poder sobrevivir junto a su familia.
Fijate vos cómo mis ancestros tuvieron en claro el enemigo y lo que representaba.
Como me hubiera gustado que esa misma nota o esa misma historia la leyeran o escucharan algunxs parientes que tienen sangre, apellido, nombres y cuantas cosas más de mi pueblo y sin embargo, se tragan por omisión, ignorancia o conveniencia el verso y la dominación de los poderosos alimentando así la letanía hacia los opresores.
Por ello, admito que no tengo "la verdad", pero tengo más que claro de qué lado de la mecha me encuentro.
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