Luego vino la Siria valiente, que resiste a un precio terrible; mientras que la guerra de propaganda sigue fuerte; y pocos en el oeste parecen ser capaz de penetrar en ella. La izquierda occidental comparte sus ilusiones con la derecha occidental."
"Una de las razónes por tal diferencia es que la nación y el estado significan algo diferente en el occidente. La izquierda occidental siempre ha visto al estado como algo monolítico y al nacionalismo como algo parecido al fascismo. Sin embargo, las ex-colonias mantenian una esperanza en el estado-nación. Las poblaciones occidentales nunca tuvieron un Ho Chi Minh, un Nelson Mandela, un Salvador Allende, un Hugo Chávez o un Fidel Castro. En consecuencia, por mucho que los intelectuales occidentales critiquen a sus propios gobiernos, no están dispuestos a defender a otros. Muchos de los que critican a Washington o Israel no defienden a Cuba ni a Siria."
"Hasta Noam Chomsky, autor de muchos libros sobre el imperialismo norteamericano y la propaganda occidental, adopta muchas de las apologéticas occidentales de la intervención en Siria."
"Aparte de la disfunción de muchos de los programas de ayuda, esta industria sigue siendo profundamente antidemocrática, con poderosas connotaciones coloniales. Sin embargo, muchos trabajadores humanitarios occidentales realmente creen que pueden ‘salvar’ a los pueblos pobres del mundo."
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